Algunos cristianos piensan que Mateo 12:32 habla sobre un lugar intermedio entre la Tierra y el Paraíso/Cielo donde el creyente será purificado finalmente para hacerle apto para entrar a la presencia de Dios. A esto se le conoce comúnmente como el Purgatorio.
En Verdad y Fe, intentamos mayormente quedarnos en lo que C.S. Lewis llamó “El Pasillo” del Cristianismo, donde no asumimos una postura de alguna de las habitaciones (denominaciones) a las que el pasillo da acceso. La razón por la que tomaré este espacio para hablar de este tema es porque el tener un entendimiento incorrecto al respecto podría tener un efecto negativo al evangelizar. Si hay oportunidad de perdón luego de esta vida, no hay tanta prisa en arrepentirse o en la santificación ahora. Además que, el concepto del purgatorio hace que el sacrificio de Cristo en la cruz para redimirnos sea incompleto para nuestra salvación y santificación, cuando la Biblia enseña que el sacrificio de Jesús fue suficiente, una vez y para siempre (Hebreos 10).
Un problema de traducción
Cuando leemos Mateo 12:32, nos tropezamos con la idea de «este mundo y el mundo venidero». Esta terminología es la que inquieta a algunos a hablar del Purgatorio. Si leemos el texto en la Nueva Traducción Viviente, encontramos lo siguiente:
“El que hable en contra del Hijo del Hombre puede ser perdonado, pero el que hable contra el Espíritu Santo jamás será perdonado, ya sea en este mundo o en el que vendrá.”
Pero miren lo que sucede si lo leemos en la Reina Valera 1960:
“A cualquiera que dijere alguna palabra contra el Hijo del Hombre, le será perdonado; pero al que hable contra el Espíritu Santo, no le será perdonado, ni en este siglo ni en el venidero.”
O en la Traducción Lenguaje Actual:
“»Les aseguro que Dios les perdonará cualquier pecado y todo lo malo que digan. Aun si dicen algo contra mí, que soy el Hijo del hombre, Dios los perdonará. Pero lo que no les perdonará es que hablen mal contra el Espíritu Santo. ¡Eso no lo perdonará, ni ahora ni nunca!”
Si nos quedamos con una traducción que hable de mundos, tendríamos que dar múltiples vueltas al asunto para tratar de explicar lo que Jesús decía a su audiencia sobre el paradero de quien blasfema contra el Espíritu. Pienso que la TLA nos explica, junto con la traducción, lo que Cristo quiso decir. Pero para salir de dudas es mejor ir al texto en griego para corroborar lo que dice:

La palabra en cuestión en hebreo es αἰῶνι (aiōni) cuya definición es: un espacio de tiempo, una época o ciclo del tiempo, especialmente de la era actual contrastada con una era futura, y una progresión de eras que llegan hasta el infinito 1.
Saber lo que significa la palabra es de suma importancia, porque es la que nos dirige en la dirección correcta al interpretar lo escrito. En este caso, pienso que la mejor traducción es la TLA que dice: “¡Eso no lo perdonará, ni ahora ni nunca!”
Significa que este texto en Mateo 12: 32 no aboga por el concepto del Purgatorio. Jesús está enfatizando que la blasfemia contra el Espíritu no tiene perdón.
¿Existe evidencia bíblica a favor de una purificación luego de la muerte?
Es importante recalcar que el concepto del Purgatorio no es un lugar para segundas oportunidades, sino para la “purificación final” del creyente 2. Significa que la persona que cree en la existencia del purgatorio, no debe dejar para luego su arrepentimiento comoquiera, pues sin arrepentimiento y conversión a Cristo, no entraría en el purgatorio, si este existe.
Pero, ¿hay evidencia bíblica de su existencia? Frecuentemente, además de Mateo 12: 32, las personas van a otros dos versículos para hablar del purgatorio: Lucas 12: 59 y 1 Corintios 3: 15. Veamos cada uno para ver si en verdad de eso es que está hablando el texto:
- El primer versículo, lo encontramos en Lucas 12:58-59 (NTV). Añadí el versículo 58 para obtener un poco de contexto, que es indispensable.
“58 Cuando vayan camino al juicio con el que los acusa, traten de resolver el asunto antes de llegar. De no ser así, su acusador podría arrastrarlos ante el juez, quien los entregará a un oficial, que los meterá en la cárcel. 59 Y, si eso sucede, no los pondrán en libertad hasta que hayan pagado el último centavo».
Si leemos el versículo 59 aparte de su contexto y le imponemos nuestro significado del purgatorio pues nos hace sentido. El problema aparece cuando se propone una interpretación alegórica. En la alegoría, todo se convierte en simbólico. Pero cuando Jesús estaba contando esta parábola era con un mensaje en mente. Aunque una parábola es simbólica en naturaleza, no están hechas para analizar cada oración por separado para tratar de entender un mensaje oculto. La historia completa de una parábola enseña según la intención de Jesús, en este caso.
Jesús no estaba enseñando sobre un lugar luego de la muerte para la purificación de las almas. Su parábola estaba centrada en la restauración de relaciones mientras se tenga la oportunidad de hacerlo. - El otro versículo es 1 Corintios 3:15, pero nuevamente, leeré del 12 al 15 para obtener el contexto:
“12 El que edifique sobre este fundamento podrá usar una variedad de materiales: oro, plata, joyas, madera, heno o paja; 13 pero el día del juicio, el fuego revelará la clase de obra que cada constructor ha hecho. El fuego mostrará si la obra de alguien tiene algún valor. 14 Si la obra permanece, ese constructor recibirá una recompensa, 15 pero si la obra se consume, el constructor sufrirá una gran pérdida. El constructor se salvará, pero como quien apenas se escapa atravesando un muro de llamas.”
Aquí nos tropezamos nuevamente con el problema de la interpretación alegórica. Es cierto que Pablo está usando una ilustración para presentar su punto, pero no es con la intención de tratar de descifrar un código secreto como si Pablo fuese un espía que trata de enviar un mensaje codificado a su organización para que los enemigos no lo entiendan.
Aquí Pablo está hablando a una Iglesia, que aunque les llama “hermanos” (1 Corintios 3:1) eran creyentes bebés en su fe. Estaban dejándose llevar por su naturaleza pecaminosa (1 Corintios 3: 3), dejándose llevar por valores del mundo sobre fama y líderes a seguir, en vez de entender que Cristo era el fundamento y los maestros como Apolo o Pablo “construían” sobre ese fundamento. La advertencia era con relación a aceptar enseñanzas incorrectas y ponerlas sobre el fundamento como si concordaban. Ese era el énfasis de Pablo, no está hablando de una oportunidad después de la muerte para ser purificados completamente.
Llegar a la conclusión de un Purgatorio, es imponer un significado sobre un texto que habla de otra cosa. Como dijo en una ocasión el teólogo D.A. Carson 3: “Como sea que interpretemos 1 Corintios 3, debe encajar bien en el argumento en desarrollo que el apóstol presenta desde 1:10 al 4:21”
Busquen a Dios mientras pueda ser hallado
Después de todo esto, es importante resaltar que la Biblia enseña que no debemos esperar a luego para cuadrar cuentas con Dios. Isaías 55:6 (NTV) lo dice mejor: “Busquen al Señor mientras puedan encontrarlo; llámenlo ahora, mientras está cerca.” La bomba teológica de hoy es que nosotros no somos soberanos sobre nuestras propias vidas. Por lo tanto, no es sabio esperar al futuro para ser salvados o purificados, si hoy mismo la sangre derramada de Jesús en la Cruz tiene poder para limpiarnos y ser aceptados por Dios. Ahora mismo.
¿Por qué esperar a mañana sin ni tan siquiera sabemos qué ocurrirá con nosotros dentro de tres segundos? La Biblia nos enseña a que Cristo nos salva en esta vida y entramos en un proceso de santificación actual que glorifica a Dios frente a los demás, ¿Cómo glorificará a Dios si nadie ve la transformación en nosotros? El momento para todo esto es ahora.
Fuentes:
1. Definición de αἰῶνι (aiōni) https://biblehub.com/greek/165.htm
2. Ximena Rondón, María, 7 datos que debes saber sobre el purgatorio (Catholic.net, según leído el 27 de diciembre de 2023) https://es.catholic.net/op/articulos/70959/cat/1173/7-datos-que-debes-saber-sobre-el-purgatorio.html#modal
3. Carson, D.A., The Cross and Christian Ministry (Michigan, Baker Books, 1993) p.69



